BRUSELAS 22 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha relanzado este martes una iniciativa bloqueada desde hace años por las diferencias entre los Estados miembro para reforzar la coordinación en la gestión común del tráfico aéreo dentro de la Unión Europea, con el reto de descongestionar el cielo europeo para reducir costes, pero también para también con el objetivo de recortar hasta un 10% de las emisiones contaminantes que genera el sector.
"Un sistema eficaz supone contar con rutas más directas y utilizar menos energía, lo que redunda en menos emisiones y costes inferiores para las compañías aéreas", ha defendido la comisaria de Transportes, Adina Valean, al presentar la propuesta revisada para reorganizar el Cielo Único Europeo.
El modelo de Cielo Único dio sus primeros pasos hace dos décadas pero Bruselas ha tenido que hacer frente en varias ocasiones a la falta de implicación de los Estados miembro, que llegaron a bloquear el último intento de revisión promovido por el Ejecutivo comunitario en 2013 y que ahora retoma Valean con varios cambios.
La comisaria ha confiado en que en esta ocasión su tramitación sea ágil, ha dicho, porque se ha trabajado para ajustar la propuesta y también porque con la salida de Reino Unido de la UE desparece también uno de los principales escollos de la negociación: la gestión del aeropuerto en Gibraltar que enfrentaba a Madrid y Londres.
Entre las novedades, Valean ha explicado que la propuesta "abandona" los bloques funcionales de espacio aéreo (FAB) --que estructuraban el tráfico en función de los flujos aéreos y no de las fronteras nacionales--, porque se ha constatado que "no estaban funcionando".
En cualquier caso, la propuesta de Bruselas no solo aboga por reorganizar la gestión de las trayectorias de vuelo, sino también por estimular la innovación digital con la apertura del mercado de servicios de datos en el sector para que esta reforma aproveche la apuesta que la UE quiere hacer por las transiciones digital y ecológica.
Así las cosas, la Comisión plantea, por ejemplo, que los Servicios de Información Común incluyan también a los aparatos no tripulados --drones-- del mismo modo que integra los datos de aparatos tripulados a partir de los que proporcionan los proveedores de servicios de navegación aérea a un coste marginal.
También pide más peso para Eurocontrol porque defiende que centralizar la gestión del espacio aéreo mejora la capacidad de reacción en momentos de crisis y para optimizar el diseño y fluidez del espacio aéreo común.