MADRID 10 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de la autoproclamada república armenia de Artsaj, en el Nagorno-Karabaj azerí, han anunciado un acuerdo con las autoridades de Azerbaiyán para la reapertura del corredor de Lachín después de las denuncias por la grave situación humanitaria en la zona por falta de suministros procedentes de Armenia.
"Las autoridades de la República de Artsaj ante la necesidad de mitigar los graves problemas humanitarios derivados del bloqueo total de Azerbaiyán han decidido permitir el acceso ruso a través de la localidad de Askeran", ha explicado el Centro de Información de Artsaj, citado por el diario armenio 'Asbarez'.
Además se ha informado de que se entregará ayuda humanitaria rusa a través de la carretera de Aghdam para llegar a la ciudad de Stepanakert, capital de Artsaj, según 'Asbarez'. La ciudad es denominada Jankendi por Bakú.
"El Gobierno ruso ha iniciado una operación de entrega de ayuda humanitaria para la República de Artsaj ante la crisis humanitaria que hay en Nagorno-Karabaj. La ayuda incluye productos esenciales rusos y llega a través a Artsaj a través de la Cruz Roja rusa y sus vehículos", ha indicado.
"A la vez se ha alcanzado un acuerdo para restablecer los envíos humanitarios de las fuerzas de paz rusas y el Comité Internacional de la Cruz Roja a través del corredor de Lachín", ha añadido.
Sin embargo, las autoridades azeríes han asegurado que el "régimen separatista" de Artsaj ha impedido la entrada de un camión con ayuda humanitaria rusa por el paso de Barda.
Un asesor presidencial de Azerbaiyán, Hikmat Hajiyev, ha destacado que el paso del camión estaba autorizado a través de la carretera de Agdam a Askaran para llegar a Jakendi (Stepanakert para los armenios), pero que y ha recordado que el 1 de septiembre Bakú ofreció la apertura simultánea de los pasos de Agdam-Jakendi y el de Lachín-Jakendi como "gesto de buena voluntad", "pero el régimen ilegal (de Artsaj) se negó". Hajiyev ha subrayado que el control instalado en Lachín "debe ser respetado".
Estas noticias llegan después de que el Parlamento de Artsaj eligiera el sábado como presidente al militar Samvel Shahramanyan, quien planteó la necesidad de negociar directamente con Azerbaiyán y lograr la reapertura de los pasos.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Azerbaiyán ha criticado al "régimen separatista títere" y ha denunciado como ielgal la votación. "La única manrea de lograr la paz y la estabilidad en la zona es la retirada incondicional y completa de las fuerzas armadas armenias de la región azerí de Karabaj y la disolución del régimen títere", ha argumentado.
Por otra parte, el Ministerio de Defensa azerí ha denunciado ataques con armas cortas en la noche del sábado en la localidad de Saybali, región de Lachín, procedentes de las posiciones del Ejército armenio, según recoge la agencia de noticias azerí Report. "Las unidades militares azeríes han adoptado las medidas de respuesta adecuadas", ha destacado Bakú.
El Ministerio de Asuntos Exteriores azerí había publicado previamente una nota en la que denuncia que Armenia "lleva casi dos años y medio abusando del corredor de Lachín con fines militares", según la agencia de noticias pública azerí, Azertag.
Bakú recuerda que el corredor está vigilado por un punto de control "que ha funcionado de manera ejemplar a pesar de todas las acusaciones y en unas condiciones muy sensibles" y que Armenia realizó "una provocación militar abierta" en ese punto el pasado 15 de junio.
Armenia y Azerbaiyán están enfrentadas por el control de Nagorno-Karabaj, habitada mayoritariamente por armenios pero controlada por Azerbaiyán. Bakú lleva meses impidiendo el tránsito por el corredor de Lachin, única vía de acceso de Armenia a Nagorno-Karabaj y los observadores advierten de que la situación es "catastrófica" por la falta de alimentos y medicinas.
Tras la desintegración de la Unión Soviética los armenios de Karabaj lograron su independencia de facto en una sangrienta guerra, pero en 2020 Azerbaiyán con el apoyo de Turquía logró recuperar gran parte del territorio en una ofensiva militar.
El alto el fuego pactado incluía la cesión por parte de Armenia de más del 70 por ciento de Nagorno-Karabaj, lo que no ha impedido los enfrentamientos esporádicos y un aumento reciente de la tensión.