ECUADOR, 22 Jan (EUROPA PRESS)
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) exigió a Ecuador que lleve a cabo una investigación exhaustiva y sancione a los culpables de la trágica muerte de cuatro jóvenes, cuyos cuerpos calcinados fueron hallados tras su desaparición en medio de una operación militar en Las Malvinas, Quito. En un comunicado, la CIDH instó a que se "investigue, juzgue, sancione y repare los hechos con la debida diligencia", señalando la importancia de esclarecer el rol del personal militar en los sucesos y de intensificar las investigaciones ya iniciadas.
Los menores, identificados como José Arroyo, de 14 años; Saúl Arboleda e Ismael Arroyo, ambos de 15, y Steven Medina, de 11, "fueron víctimas de desaparición y asesinato", afirmó la CIDH. "Sus cadáveres fueron destruidos presumiblemente para eliminar evidencias y buscar impunidad", declaró el organismo.
La CIDH reiteró la necesidad de que el Estado asegure el acceso a la justicia para las familias y comunidades afectadas, aplicando medidas para prevenir que estos incidentes se repitan. Además, hizo un llamado a que las políticas de seguridad interna del país adopten un enfoque de Derechos Humanos, enfocándose especialmente en la protección de niños, niñas y adolescentes afrodescendientes ante la violencia y el perfilamiento racial.
Este caso se contextualiza en una serie de estados de excepción en Ecuador, que han otorgado a las Fuerzas Armadas roles en seguridad ante un supuesto conflicto armado no internacional, apuntó la CIDH.
Por otro lado, el Ministerio de Defensa, dirigido por Gian Carlo Loffredo, apeló una sentencia de hábeas corpus que reclamaba la investigación de la desaparición y asesinato de los jóvenes como desaparición forzada, bajo el art. 84 del Código Penal. Loffredo acusó a la jueza de "persecución política" tras la dictación de prisión preventiva contra 16 militares implicados. La CIDH destacó la acción judicial como un intento urgente de localizar a los desaparecidos y expresó su preocupación por las declaraciones del Ministerio de Defensa, advirtiendo sobre los riesgos que estas podrían generar sobre la independencia judicial y los esfuerzos de defensa de los Derechos Humanos en el país.
Los cuerpos de los adolescentes fueron encontrados el 19 de diciembre, cerca de la base aérea del Ejército en Taura, a 30 kilómetros de Guayaquil.
Los menores habían desaparecido después de un partido de fútbol, siendo detenidos y trasladados por militares.