MADRID 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Bahamas ha puesto en marcha un innovador proyecto de conversión de deuda que le ahorrará más de 124 millones de dólares (119,2 millones de euros) en los próximos 15 años y le permitirá mejorar la conservación de los océanos y la gestión de su Sistema de Áreas Protegidas.
El proyecto, apoyado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Programa de Bonos para la Naturaleza de The Nature Conservancy (TNC) y otros socios, ha permitido al Gobierno recomprar 300 millones de dólares (288,5 millones de euros) de deuda externa con los ingresos de un nuevo préstamo de 300 millones de dólares (288 millones de euros) concedido por Standard Chartered Bank.
El Fondo de Áreas Protegidas de Bahamas gestionará los fondos de conservación generados por el acuerdo. Rothschild & Co asesoró al Gobierno de Bahamas.
"Desde 1958, Bahamas ha liderado la conservación de los océanos mediante la creación del Parque Terrestre y Marino de Exuma. Ahora damos otro paso ambicioso con un programa económico que promueve la conservación de los océanos y beneficia a las comunidades locales", ha expresado la directora de la Unidad de Asesoramiento sober Cambio Climático y Medio Ambiente de las Bahamas, Rochelle Newbold.
El proyecto de conversión de deuda proporcionará financiación esencial para iniciativas de apoyo a la gestión eficaz de la zona oceánica de las Bahamas, desarrollo de capacidades y apoyo técnico. Los compromisos de este proyecto incluyen la gestión eficaz de áreas marinas protegidas con planes climáticamente inteligentes y la finalización de un plan nacional de gestión de manglares para proteger hábitats vitales como arrecifes de coral, praderas marinas y manglares.
Además de proporcionar una garantía de 200 millones de dólares (x millones de euros), el BID está apoyando políticas de fortalecimiento institucional para la gestión ambiental y de la deuda pública en Bahamas.
Esta operación ayudará al país a mejorar su estabilidad macroeconómica, fortalecer su gobernanza ambiental para la sostenibilidad y la protección de la biodiversidad, y optimizar el marco institucional de la gestión de deuda.
Aprovechando su experiencia en el desarrollo y la ejecución de estos innovadores proyectos financieros y de conservación en América Latina y el Caribe, el BID facilitó el diálogo entre los socios y desempeñó un papel catalizador en la estructura de mejora del crédito, atrayendo a donantes y compañías de seguros para aumentar la escala de la transacción y, a su vez, elevar los ahorros disponibles para la conservación.
"El BID se enorgullece en desplegar enfoques innovadores para apoyar a nuestros países a alcanzar eficazmente sus objetivos de desarrollo sostenible, incluidos sus esfuerzos de conservación de la biodiversidad", ha afirmado el presidente del BID, Ilan Goldfajn.