BOGOTÁ, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han reclamado este viernes el cese de "la racha de asesinatos de defensores de Derechos Humanos y activistas políticos" que ha atribuido a los grupos paramilitares.
"Desde La Habana, nuestra solidaridad y condolencia a los familiares y amigos de Marisela Tombe, Klaus Zapata, William Castillo, Alexandre Oime y Milton Escobar, las víctimas más recientes de la intolerancia y el paramilitarismo, que se pavonea desafiante e impune contra la buena marcha del proceso de paz", ha dicho la guerrilla en un comunicado.
La insurgencia ha denunciado que, "en lo que va corrido del mandato de este Gobierno, según el programa Somos Defensores, han sido agredidos 2.244 defensores de los Derechos Humanos, de los cuales 1.687 recibieron amenazas, 346 fueron asesinados, 206 víctimas de atentados, 131 detenidos arbitrariamente, 29 judicializados y 16 desaparecidos".
"¿Cómo puede ocurrir esto en medio de un proceso de paz que avanza hacia la firma del acuerdo final?", han cuestionado las FARC, alertando de que, "si el establecimiento ('establishment') no combate resueltamente el fenómeno paramilitar, estaría contribuyendo con su indiferencia a configurar la guerra sucia del postconflicto".
Por ello, han exigido "una respuesta precisa y coherente, no declaraciones vagas". "No se pueden dar más largas al desmonte del fenómeno del paramilitarismo, si realmente queremos el fin de la guerra y la no repetición", han subrayado.
Incluso han solicitado a la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia que "tome atenta nota de estos hechos" y "los ponga en conocimiento del Consejo de Seguridad".
Además, han insistido en que la mesa de negociaciones "debe abrir a las organizaciones sociales y populares sus puertas para que aporten fórmulas que, en el marco de la discusión sobre el fin del conflicto, contribuyan al desmantelamiento de la impunidad y el paramilitarismo".